Si tu hijo/a llegó "atún"
No podemos quedar indiferentes a algunas cosas que se ven en fin de semana. En concreto hoy hablaremos del fin de semana pasado de Carnaval, de las fiestas de la "juventud" que algunos/as no saben llevar bien.
Que a menores se deje pasar a los salones y locales que con motivo de la fiesta organizan algún tipo de evento no es malo, de hecho se ha convertido en parte de la celebración, incluidas las celebraciones nocturnas (algunas veces, única reminiscencia de "Carnaval"). Lo malo comienza cuando esas "pequeñas" personas, acuden a estos lugares sin control ninguno: 1º sin control de lo que hacen; 2º sin control de sus padres; y por último, sin control del local o lugar del evento, que los deja pasar sin más, sin adaptar a a este grupo de personas (las menores de edad), las bebidas que pueden adquirir en el sitio.
Al asunto se le pueden buscar muchas soluciones, según la óptica desde la que se mire el problema. Desde aquí, la opinión predominante es que muchas de las situaciones que se viven en el momento de "la fiesta" se solucionarían con unos datos a conocer por cualquier padre o madre, que pueden conseguirse con estas tres fáciles preguntas: ¿dónde vas a estar? ¿qué planes tienes?, ¿hasta cuándo (hora) vas a estar?
Así de fácil y sencillo puede ser que evites que la hija y su amiga (¿¿13-14 años??) estén dando el cante en cualquier sitio haciendo un "twerking" delante del personal, o que el hijo y el amigo se piquen a ver quien se bebe lo que llevan, de trago (¿16 años recién cumplidos?). Todo está, al fin y al cabo, en saber hacer BIEN las cosas.
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