Hay juegos que nacen libres de ataduras: son los primeros de una saga, o símplemente son difíciles de comparar con otros. Para Eldritch Horror las cosas no van a ser tan fáciles. Arkham Horror llegó antes que él, es similar en más de un aspecto y… está considerado una obra de arte. Y acompañándolo trajo innumerables titulos que basan su temática en la obra de Lovecraft. Todo un reto si tu objetivo es arrasar, como es el caso de este juego.
Con tan sólo una sesión de Eldritch Horror a mis espaldas, y unas inmensas ganas de dedicarle unas cuantas horas más para poder ofreceros una amplia reseña, me dispongo a contaros mis primeras impresiones, con la única pretensión de transmitiros lo poco -o mucho- que una primera partida puede transmitir. Y la primera palabra que se me viene a los labios es “épico”. Si Arkham Horror transmitía una sensación de claustrofobia apoyada quizá en la sensación de no poder abandonar la modesta localidad de Arkham, este nuevo título te deja la sensación contraria: la necesidad de viajar más y más deprisa para ser capaz de abarcar lo largo y ancho del tablero, que representa nada menos que el globo terráqueo.
Y es que la escala “global” de este juego le da un sabor especial. La sensación de estar recorriendo el mundo para salvarlo, junto con la atinada diferenciación entre las posibles casillas (mar, naturaleza y ciudad), siendo diferentes los eventos que podrán sobrevenirnos en cada una, ayudan a transmitir esa sensación épica e inabarcable de la aventura en la que nos sumergimos apenas arrancamos la partida.
Aunque no pretendía centrar estas primeras impresiones, ni la posterior reseña, en una mera comparación con Arkham Horror, son muchas similitudes que guarda con aquel. De hecho, da la sensación por lo jugado hasta el momento, que Eldritch recoje el testigo de muchas de las ideas apuntadas y plasmadas en su predecesor, y les dá un mejor uso, perfeccionando y ampliando alguna de estas mecánicas. Una muestra de ello es el uso (mucho más temático y completo) de las pistas, dotándolas de entidad propia, provocando que cada jugador deba superar un evento antes de hacerse con una de estas poderosas fichas.
Trataremos de acabar con los cuatro primigenios que ofrece el juego (no será tarea fácil, pues Cthulhu parece guardar más de una sorpresa), utilizando tantos hechizos, armas y equipamiento como no sea posible; rotando entre personajes y visitando todas las posibilidades que este juego ofrece, para traeros cuanto antes un análisis lo más profundo posible sobre Eldritch Horror. El mundo nos necesita.
Video: zacatrus
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