Juegos de Mesa: Las Leyendas de Andor.

Ganador de uno de los premios a mejor juego de mesa de este año, "Las Leyendas de Andor" tiene muy buena pinta.

“Enemigos surgidos de los bosques y las montañas se dirigen hacia el castillo del viejo rey Brandur. Sólo vuestro pequeño grupo de héroes puede hacerles frente. ¿Seréis capaces de defender el castillo? A la primera aventura le siguen cuatro más. En la minas subterráneas os esperan valiosas piedras preciosas, pero también os encontraréis con peligros. Y, por último, tendréis que enfrentaros a un viejo y poderoso dragón que acaba de despertar”.Narración, mucha narración y aventuras es lo que nos ofrece “Leyendas de Andor”. Si quieres saber qué más, no tienes más que seguir leyendo…

Si no habéis permanecido aislados de la industria del juego de mesa durante el último mes y medio, no hará falta que os cuente que “Leyendas de Andor” es la nueva apuesta de Devir en el género de aventuras, ni que se trata de un ambicioso cooperativo que pretende marcar un antes y un después en el género. Lo que seguro que queréis saber es la opinión del único blog de habla hispana (y quizá del resto) dedicado en exclusiva a los juegos cooperativos…

Pues bien, estamos ante un juego claramente narrativo. Esto es, en cada partida se nos contará una historia completa, con un planteamiento, un desarrollo y un desenlace (que variará dependiendo de nuestra habilidad), que formará parte a su vez de una línea argumental que las une a todas. En ella, los personajes que podemos escoger, representan a 4 héroes a las órdenes del Rey Brandur, sobre los que recae la responsabilidad de mantener a las hordas del mal alejadas del castillo, mientras buscan la forma de conseguir diferentes objetivos que acerquen al reino a la total liberación.

Cada uno de los personajes (un enano/a, un aguerrido guerrero/a, un mago/a y unarquero/a) tienen una habilidad única, y una forma diferente de llevar a cabo los combates. Lo que comparten todos es la posibilidad de aumentar su nivel a medida que avanza la aventura, lo que aumentará nuestra resistencia en la batalla, y nuestra capacidad de combate, haciéndonos más poderosos en general. A parte, los héroes pueden equiparse con diferentes objetos (escudo, arco, casco…) que nos aportarán nuevas habilidades cuando los equipemos, siendo alguno de ellos perecederos, y con un número de usos determinado (véase el escudo o los odres).

Todo esto le confiere al juego un toque “rolero” muy buscado, que hará las delicias de los amantes del género fantástico, y de los que como yo, han pasado horas disfrutando del los juegos de rol de “lápiz y papel”. Incluso la presencia de un peón llamado “narrador”, nos transporta a uno de esos juegos, pues será el encargado de hacer avanzar la historia y marcar los hitos y “contar” a los jugadores lo que sucede en cada uno de ellos. Esto hace que cada partida parezca estar guiada, y no a la deriva. Algo muy de agradecer cuando se trata de cumplir varias misiones.

Los jugadores contarán con 7 horas del día (hasta 10 en caso de que se quiera asumir el penalizador que esto supone) para realizar acciones. Una acción por hora. Moverse oatacar, serán las acciones que consumirán una hora, habiendo otras (recoger objetos, interactuar con el escenario, comprar, etc.) que no consumirán horas, pero obligarán al jugador a finalizarán el turno dando paso al siguiente héroe. Cuando todos los jugadores acaben “su día”, llega el momento de las fuerzas oscuras, que se moverán imparables hacia el castillo, y nos obligarán a levantar una carta de evento, que a menudo nos complicará algo más nuestra aventura. Por último el narrador avanza por su conjunto de casillas (de la “A” a la “N”), acortando el tiempo que tenemos para finalizar la misión, y provocando en alguna de ellas la lectura de alguna de las cartas de Leyenda en las que se nos suele encomendar nuevos objetivos, y pueden aparecer nuevos y más poderosos enemigos.

Y aquí llega lo que para mi es la regla más controvertida del juego (por favor, comentadnos vuestra opinión), y es la regla por la que, cada vez que se venza a una de las criaturas que avanza hacia el castillo, se deberá hacer avanzar al narrador, independientemente de su movimiento al final de la fase de héroes. Esto, por una parte, hace que el juego no dure demasiado y no se haga pesado (aunque yo no veo porqué se iba a hacer pesado), pero por otra parte, convierte al juego en un correcalles vertiginoso en el que tendrás que pensarte mucho a qué criatura ajusticias, y a cual dejas entrar en el castillo por no peligrar aún el límite de estas (sobre pasado el límite, la leyenda se daría por perdida). Si bien es cierto que no aplicar esta regla supone el fracaso de la experiencia jugable por reducirse demasiado la dificultad, estamos probando con algunas variantes – que ya os contaremos- para equilibrarlo de tal forma que las sensaciones de dificultad y de esperanza esten presentes en su justa medida.

De las 6 leyendas anunciadas (y aquí viene un pequeño apunte negativo) la primera no es más que un entretenido tutorial que pronto desearemos dejar de lado para pasar a las leyendas de verdad, qué sorprendentemente finalizan en la número 5, pues la sexta de las leyendas es un conjunto de tarjetas en blanco con la sorprendente frase impresa: “Crea tu propia leyenda”, por lo que nadie debe llevarse a engaño. En “Leyendas de Andor”, sólo se aportan 4 leyendas completas para ser jugadas en condiciones. De cualquier forma, también ha sido publicada una Leyenda adicional (La liberación de la mina) oficial y gratuita, que cubre ese hueco dejado por las leyendas de la caja básica.

El juego viene impecablemente presentado. Todo en él está pensado para ayudar al jugador a hacerse con los “controles” de forma rápida e intuitiva. Tanto es así que el manual es un díptico con cuatro caras de texto e ilustraciones acompañado de otro que nos lleva de la mano durante la primera Leyenda. En ésta -especialmente- y las siguientes leyendas, todos los textos de ambientación vienen acompañados con minuciosas explicaciones de las reglas, de forma que nadie se pierda o tenga que buscar entre las gruesas páginas de un manual del todo innecesario.

La calidad de los componentes es excelente, y aunque se echan de menos un buen batallón de figuras de plástico bien detalladas (que han sido suplantadas por figuras planas de cartón con su consabida peana), se agradece a la hora de hacer frente al precio de un juego que, por calidad y cantidad de componentes, bien podría haber sido mucho más caro. Bien por Devir, y por saberse adaptarse a los tiempos que corren sin reducir la calidad por debajo de los mínimos requeridos.

Un tablero con dos caras y mapeados diferentes, un buen número de componentes de uso especial (como la ingeniosa figura del dragón, las piedras rúnicas o la torre) prometen una buena variedad en las aventuras que nos esperan y la apasionante posibilidad de crear nuevas leyendas para los más creativos, o esperar a que otros lo hagan y las publiquen, para los demás.

Sin duda, este “Leyendas de Andor” se eleva al Olimpo de mis juegos cooperativos preferidos. Se trata de un juego que vale hasta el último céntimo de su precio, que nos brinda un buen número de aventuras, pero sobre todo, nos promete un número ilimitado de ellas sin tener que recurrir a costosas expansiones.

La imaginación de la comunidad jugona bastará para darle larga vida al reino de Andor.

Fuente: fanhammer