La información que copio y pego aquí es del usuario "granaino82" que, en dos partes, habla en el post titulado "Casos curiosos de nuestro cementerio", sobre el mismo y su historia. Una información muy interesante sin duda.
Hela aquí:

Lo construye D. Victoriano fuentes, albañil, que se compromete a hacerlo por 9900 pesetas. Pero es requerido al poco tiempo por desplomarse la pared de levante (la del lado de la puerta lateral) por lo que es necesario reforzarla (como hoy día se ve). Se inaugura en 1894. Su primer sepulturero fue D. Balbino Bellon, y en 1894 se acuerda retirar del antiguo la sala de autopsias y llevarla al hospital.
Pero con tal economía de medios se construyo, que al año ya se había desplomado otra pared, y medio cementerio era un inmenso lago, y se propuso ampliar el antiguo y levantar la clausura (dejo de enterrarse gente en 1894) para que a elección de las familias se pudieran enterrar en uno o en otro. El ayuntamiento procede a reforzar la pared oeste (la que da a los talleres de vimegal), colocar la piedra de autopsias. Como el párroco no pagó la iglesia en su interior proyectada (una capilla neogotica nunca realizada) la corporación aprueba no dar al párroco la asignación estipulada en el reglamento del cementerio.
El doctor Sanz, gran impulsor del cementerio, propuso el enterramiento en tierra como el mas adecuado, en contra de la utilización de los nichos. Para dar ejemplo, él eligió para su sepultura tal sistema de enterramiento.
Añadir que una de las premisas con las que se construyó el nuevo cementerio era que no fuera visto desde la antigua carretera, algo que con la ordenación actual viaria no se cumple (cosa que tampoco entiendo como se hizo, pues la fachada del cementerio queda en alto) y se puso como condición que fuera de capacidad tal que no se precisara exhumar en 20 años, para que no se repitiera la situación de saturación del antiguo.
Mientras, el ayuntamiento en 1900 tuvo que librar una partida presupuestaria para restaurar bovedas de nichos y tejados del antiguo cementerio, así como para volver a poner la puerta del mismo, que se hallaba inservible, y arreglar el camino al cementerio civil, que había sido borrado debido a la labor de arado del propietario de la finca colindante.
La culpa de la inutilidad del nuevo recinto habría que buscarla en el desnivel provocado para allanarlo, el nulo drenaje al exterior del agua estancada y la malisima calidad de los muros perimetrales, construidos en piedra y barro, teniendo que ordenar el ayuntamiento que se construyeran al menos los cimientos de cal y piedra, para dotarlos de mayor solidez.
La nota peculiar la pone el párroco, que advierte que en el nuevo plano no se contempla separación del cementerio civil, advirtiendo el problema que esto ocasionaría en breves fechas, pues cada vez eran mas los extranjeros no católicos que venían, y los mismos no consentirían enterrarse en el cementerio católico. Por ello, el nuevo cementerio sufre una ampliación que desvirtuó su proyectado carácter simétrico.
Es una autentica pena que no se construyera el cementerio inicialmente trazado. Para hacerse una idea, la capilla neogotica se hubiera ubicado en lo que ahora es la entrada principal, teniendo a cada lado unas portadas de ingreso de estilo neogotico (similar a la fachada del hospital de los marqueses y colaterales a esta, la casa del enterrador y un anejo para sala de autopsias y servidumbre del complejo. Tenia proyectado una amplia avenida central(la que ahora existe) que orlada de una rotonda en el centro, continuaría hasta la curva de nichos que cerraba en su extremo (donde ahora se ubica la capillita esa con aspecto de casa rural campera tan horrorosa).
De la rotonda central salia otro camino transversal, de manera que dividía el cementerio en cuatro patios, donde los enterramientos se disponían perfectamente alineados, en consonancia con una manera de entender el trazado racional propio de una ciudad de plano ortogonal. Hubiera sido precioso.
Y como nota curiosa, una vez finalizado el sepelio, el duelo se despedía en el final de la población, esto es, la parroquia, preste y clero acompañaban con cruz alzada (cruz sin palo si el finado era párvulo) hasta el paseo de las delicias (actual plaza). Esta costumbre se mantuvo hasta la década de los 60 del pasado siglo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Se coherente con tus comentarios e intenta ser educado y respetuoso en los mismos.